Independientemente de las maravillas que tiene Turquía, el visitante puede además realizar aventuras únicas e increíbles.

En un viaje que realicé a ese país con mi hermano Raúl, además de visitar los lugares más emblemáticos como Estambul, Ankara, Antalya y otros más, tuvimos andanzas en dos lugares, cuyos acontecimientos resultaron verdaderamente dignos de recordar. Sucedieron en Capadocia y Pamukkale.

Relataré, Capadocia se encuentra en Anatolia, es una región de formaciones calcáreas increíbles que tienen las formas más inimaginables, donde hay cavernas que sirvieron de hogar o como refugios para los habitantes en su momento. Allá tuvimos la oportunidad de viajar en globo.

En la madrugada antes que salga el sol, los prestadores de servicios pasan al hotel a recoger al paseante que previamente ha contratado la excursión. Todos son llevados a una explanada donde cientos de personas aguardan a que los aerostatos sean inflados para hacer el viaje.

Mientras los ayudantes despliegan los globos, los presentes disfrutan de un café turco caliente en espera para abordar el balón.

La inflada del artefacto se realiza introduciendo aire caliente al dirigible para que éste pueda elevarse, tarda aproximadamente 30 minutos, tiempo durante el cual el cielo se va inundando paulatinamente de esferas de tonalidades diferentes que surcan por los aires. Cada una con un aforo de 20 personas máximo, va liderado por un experto piloto que controla el calor que sirve de alimento al vehículo para que éste suba y baje según las condiciones climáticas y que conoce perfectamente la zona y los comportamientos de los vientos.

El timonel lleva con destreza la nave hasta el final. El panorama aéreo es único con globos que sin tocarse pintan de colores el firmamento. Hay dos vistas fantásticas, una, el cielo inundado de cientos de globos de colores surcando por los aires que le dan un toque único a la bóveda celeste y segundo, la vista hacia abajo de las formaciones rocosas que la naturaleza nos ha regalado.

El viaje dura aproximadamente una hora, aterrizando el piloto exactamente en lugar donde somos esperados por un vehículo. Al concluir el recorrido se brinda con vino espumoso y se charla la experiencia. Es un viaje inolvidable. Quien vaya a Capadocia debe hacerlo.

*Abogado y empresario. WhatsApp: 9999-00-00-44.