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Un torneo sin propietario

El cuarto y último Grande de la temporada tenística, como cada año, se realiza en la pista dura de Nueva York, ese Grand Slam, oficialmente se comenzó a jugar en 1881, es solamente cuatro años más joven que el aristocrático certamen inglés. En sus comienzos competían únicamente jugadores de casa y, desde 1968 pasó a ser el torneo que actualmente es: El Abierto de los Estados Unidos, conocido coloquialmente como, US Open.

Ese campeonato ha pasado por todo tipo de superficie: primeramente se jugaba en canchas de hierba, posteriormente adoptó la tierra batida y por último a partir de 1979 su piso es de cemento, que consiste en una base de hormigón recubierta con resina acrílica, caucho y sílice. A principios de este siglo el suelo fue pintado de azul para mejor visibilidad de la pelota. Es un torneo que nunca se ha interrumpido a pesar de las dos Grandes Guerras y la pandemia Covid. Nueva York ha sido siempre sede desde el comienzo de la era abierta (1968), primeramente en Forest Hills y en la actualidad Flushing Meadows, que alberga el complejo denominado Billie Jean King, con su inmensa cancha central llamada Arthur Ashe, ambos nombres puestos en honor a dos celebres jugadores de patio.

Lo interesante de este Torneo es que no existe un jugador que sea dominante. Los Tres Grandes, Roger Federer, Rafael Nadal y Novak Djokovic, han obtenido en conjunto la increíble suma de 63 títulos de Grand Slam, avasallando el deporte blanco en esas contiendas por 16 años, algo que difícilmente volverá a ocurrir, pero cada uno ha sentado sus dominios en superficies diferentes, así, en el pasto el rey indiscutible es el suizo quien ha levantado el trofeo de Wimbledon ocho veces, por su parte el español ha llevado a sus vitrinas en Manacor, catorce veces el galardón de los Mosqueteros que se obtiene en Roland Garros, por último, el serbio ha hechos de Australia su coto de poder al ganar nueve veces la presea.

Pero en el Abierto norteamericano no hay a la fecha un claro emperador que siente sus reales en ese torneo, quienes han ganado el mayor número y se encuentran empatados han sido Jimmy Connors, Pete Sampras y Roger Federer con cinco cada uno. Rafael Nadal tiene cuatro en su palmarés. Nueva York, la ciudad que nunca duerme, es tierra de nadie, ningún jugador ha podido sentar sus reales y dominarla. ¿Quién será el primero? Demos tiempo al tiempo. Mérida, Yucatán, septiembre de 2022.

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