Baalbek, un tesoro libanés
Punto de Vista… Viajes
Rafael J. Ramos Vázquez (*)
A pocos kilómetros de Beirut, situada en las montañas, se encuentra la ciudad que es el centro arqueológico más importante de Líbano: Baalbek. El viajero que ha recorrido ruinas romanas, quedará impresionado de ese conjunto majestuoso.
No tiene el esplendor de antaño por la destrucción, los saqueos y los terremotos de los que ha sido objeto, pero aún así preserva la grandeza que inspira al visitante respeto y admiración.
En la antigüedad esa polis se dedicaba al culto del dios semita Baal. Por su situación geográfica, era uno de los centros donde pasaban las caravanas para dirigirse a las ciudades fenicias de Tiro, Sidón, Biblos y Beirut.
Intentaré describir la hermosura de ese complejo.
El turista, conducido por un guía, inicia la visita pasando por los Propileos, unos vestíbulos gigantescos que conducen al interior de la Acrópolis. Esa antesala tiene una serie de escalones que conducen al llamado Patio Hexagonal. Esta área tiene una decoración en bajorrelieves, nichos y exedras, elementos clásicos de la arquitectura romana. Según el guía los sacerdotes acostumbraban meditar en ese patio antes de entrar al templo.
Inmediatamente después, el paseante se encuentra en el Gran Patio, Patio de los Sacrificios o de los Altares, es imponente por sus dimensiones y estructura, mide 135 metros de largo por 113 metros de ancho y había en él un oráculo. Las exedras y los nichos, cavidades realizadas en los muros para colocar en ellos estatuas, son los elementos más vistosos que quedan de ese patio.
La vista inmediata es el Templo de Júpiter, el más grandioso del Imperio Romano, poco queda de él, solamente seis columnas subsisten, son las más grandes del mundo con 22 metros de altura y 2.5 metros de diámetro, pero es evidente su belleza, amplitud y tamaño.
Después se llega al Templo de Baco, llamado así por los relieves esculpidos con escenas de ese dios, en mi opinión el área más bella. Se ha conservado casi en su totalidad, con escenas orgiásticas como adornos; el santuario es simplemente impresionante.
Baalbek, a mi parecer, tiene los vestigios romanos más esplendorosos. Seduce al visitante con la magnificencia de sus ruinas.
El conjunto arquitectónico todavía impresiona por su estado de conservación e imponente majestuosidad.
Hay que visitarlo, quedarán fascinados por su esplendor y belleza.
Abogado y empresario. WhatsApp: 9999-00-00-44.