Joven estrella
Alexander Zverev
Zverev: ascenso imparable
Rafael José Ramos Vázquez (*)
El cambio generacional en el mundo del tenis se está dando de manera inexorable.
La juventud, ese fuego impetuoso, al final se impone sobre la experiencia de las grandes figuras que han emocionado al deporte de la raqueta durante años y que parecían invencibles, sólo había que esperar que Cronos hiciera su parte y la naturaleza la suya.
Y el momento ha llegado.
De las jóvenes promesas que están cristalizando, hay una que merece atención especial: Alexander Zverev.
“Sascha”, es un alemán con raíces rusas, de apenas 21 años. Viene de una familia de tenistas. Y no hace mucho, Rafael Nadal dijo de él que es el presente y el futuro del tenis. Voz autorizada.
Hay un grupo de jugadores veinteañeros, promesas todos, destinados a liderar la elite del deporte blanco, integrado entre otros por el búlgaro Grigor Dimitrov, el austríaco Dominic Thiem, el coreano Hyeon Chung, el argentino Diego Schwartzman y el australiano Nick Kyrgios. Y sin duda, el teutón es quien más madurez ha alcanzado y está en constante ascenso.
Entre sus principales cualidades tenemos: un buen primer servicio, fuerte, alcanza los 200 kilómetros por hora, y bastante preciso. Además tiene la característica de que es un excelente jugador desde la línea de base, es agresivo y dueño de un magnífico revés a dos manos, poderoso. En la red es implacable.
Esta promesa ha madurado mucho durante los últimos dos años, y podemos decir que ya es una realidad. Actualmente está en el tercer lugar del ranking mundial, sólo detrás de Roger Federer y el mismo Nadal.
Este año ha sido finalista en Miami, se coronó en Múnich y en días pasados conquistó el trofeo de Madrid. Defendió puntos en Roma, que ganó el año pasado, siendo finalista ahora, pero fue derrotando por Nadal ayer, en tres sets.
Es un fuerte aspirante para conquistar el máximo torneo de arcilla: Roland Garros. No lo perdamos de vista, pues está destinado a ser en poco tiempo el número uno del mundo.
Aunado a todas las características que he mencionado, tiene una primordial hoy en día: juventud.
Y como dicen las letras del poeta: “juventud, divino tesoro”.— Mérida, Yucatán, mayo de 2018.
(*) Abogado y empresario
Fuente: Diario de Yucatán