La tierra del dragón, Bután
Para acceder a Bután, la cual es una pequeña nación, el turista debe aterrizar en Paro, una ciudad histórica con muchos edificios sagrados que tiene el único aeropuerto internacional, donde el piloto necesita mucha pericia para descender ya que se encuentra entre montañas que lo hace sumamente peligroso.
Bután —que significa “Fin del Tíbet”— actualmente tiene por nombre Reino de Bután. Se encuentra a las faldas del Himalaya, siendo su capital Timbú, la ciudad más grande. Su territorio posee la montaña más alta del mundo que no ha sido escalada por nadie, la cual tiene una elevación de arriba de siete mil metros y se llama Pico Blanco de los Tres Hermanos.
El budismo es la religión que las tres cuartas partes de sus habitantes profesan.
El total de sus habitantes no llega al millón. Su gente es amable y tiene los ojos rasgados.
Es considerado un país caro e inasequible, ya que se cobra un impuesto al turista por cada día de estancia.
Un animal emblemático del lugar es el takín, un mamífero caprino cuyas extremidades terminan en pezuñas, es realmente bello y raro.
Cuando el extranjero llega al aeropuerto, un guía que únicamente habla inglés lo conduce por todo el pequeño territorio, paseando por Timbú con sus atractivos. Durante el recorrido lo lleva a Punaka, antigua sede de la corona, que se encuentra a pocas horas de la metrópoli. En uno de los paseos el conductor comenta que su país es considerado Shangri La, lugar imaginario en las montañas descrito por el inglés James Hilton en su novela “Horizonte perdido”.
El traje nacional de los varones se llama gho, consiste en una túnica hasta la rodilla atada en la cintura por un fajín de tela; mientras que la indumentaria de las mujeres les llega hasta los tobillos se llama kira.
El baile regional se denomina cham, una danza que los bailarines butaneses ejecutan disfrazados con máscara, acompañados con música de instrumentos tibetanos autóctonos.
La gastronomía es a base de arroz y trigo, es buena pero nada espectacular.
Bután es un país al que van únicamente los turistas que desean conocerlo y ambicionan nuevas experiencia. Es recomendable visitarlo, pero sólo una vez.
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